Mike Lynch, un conocido empresario británico de TI, falleció en un terrible accidente náutico cerca de Sicilia, dejando a amigos y colegas sumidos en la desesperación. Lynch, de 59 años, se encontraba entre los fallecidos cuando el lujoso barco Bayesian se hundió en medio de fuertes lluvias la madrugada del lunes. Su hija, Hannah, de 18 años, sigue desaparecida, y la búsqueda continúa.
Lynch, considerado el equivalente británico de Bill Gates, fue una figura destacada en el sector tecnológico. Sus iniciativas, en particular la exitosa venta de Autonomy a Hewlett-Packard por 11 000 millones de dólares y su participación en la creación de Darktrace, tuvieron una enorme influencia en la industria. Sin embargo, su vida estuvo marcada por una larga batalla legal por la venta de Autonomy, que resultó en su controvertida extradición a Estados Unidos y su posterior absolución a principios de este verano.
David Yelland, exeditor de The Sun, calificó a Lynch como una pérdida irreparable tanto para sus seres queridos como para el país. "Es el mayor emprendedor tecnológico del Reino Unido de las últimas décadas", comentó. "Perderlo justo cuando estaba reconstruyendo su vida es devastador".
Brent Hoberman, cofundador de Lastminute.com, también expresó su pesar, afirmando que Lynch aún tenía mucho que ofrecer al sector tecnológico británico. «Aún estaba en camino y su proceso judicial lo había distraído durante una década», declaró Hoberman a la BBC.
El fallecimiento de Lynch se produce tras una época turbulenta. Su principal adquisición con First Horizon Corp. fracasó en mayo de 2023 debido al mayor escrutinio regulatorio. A pesar de su absolución, la gestión del caso por parte del banco, así como las persistentes preocupaciones legales, ensombrecieron su carrera.
Lynch nació el 16 de junio de 1965 y su temprano interés por la tecnología comenzó con una microcomputadora BBC. Su entusiasmo empresarial lo impulsó a cofundar Autonomy en 1996, empresa que utilizaba métodos estadísticos avanzados en su software. El rápido desarrollo de la empresa y su posterior venta a HP lo consolidaron como una figura importante en la industria tecnológica. Su posterior empresa, Invoke Capital, fue esencial para la formación de Darktrace, una importante startup de ciberseguridad.
A pesar de sus considerables logros, Lynch fue objeto de constante escrutinio. El desastre del barco, supuestamente causado por la rotura de su mástil de aluminio durante una tormenta, marca el terrible final de una larga carrera. La esposa de Lynch, Angela Bacares, fue rescatada, pero la muerte de su hija agravó la miseria.
Richard Holway, experto en informática y amigo cercano, lamentó el prematuro fallecimiento de Lynch y se preguntó qué otros éxitos habría alcanzado. Quienes conocieron y trabajaron con Lynch recordarán y apreciarán sus contribuciones a la tecnología, así como su prestigio como destacado emprendedor británico.
Mientras el mundo de las TI recuerda el legado de Lynch, su pérdida se siente profundamente en toda la industria y más allá. Su ingenio y sus considerables contribuciones al sector siguen siendo testimonio de su notable trayectoria.